jueves, 1 de marzo de 2012

Un azote a tiempo...

¿A tiempo de qué?

De ganarte el miedo de tu hijo por encima del respeto y la admiración.
De enseñarle que su cuerpo, su estado de ánimo, sus sentimientos, no merecen ser respetados por la autoridad.
De transmitir que sus necesidades pueden esperar, o simplemente ser anuladas.
De elegir la comodidad, la ausencia de comunicación, el control, y las neuras del adulto a costa de la salud emocional de un niño, el suyo.

Y sí, estamos a tiempo.

A tiempo de cambiar lo aprehendido por lo elaborado, pensado y sentido, por la propia elección.
A tiempo de mirar a ese niño y reconocerlo merecedor de respeto.
A tiempo de observarnos por dentro y preguntarnos, y respondernos, y cuestionarnos, y darnos la vuelta, y empezar de nuevo...

Estamos a tiempo.




13 comentarios:

  1. Me ha gustado mucho la publicación. Sí, estamos a tiempo. Gracias por la aportación.

    Salutaciones. :)

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  2. Me encanta!!!! Ainsss como odio esa frasecita, lo que le diría yo a unos tantos que la dicen... saludos y la foto de tu peque de ayer con su amiguico es genial, vaya par de dos!!

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  3. Totalmente de acuerdo, siempre he pensado que educar a un niño dándole un azote no sirve más que para enseñarle a que puedes controlar a los demás si les pegas, que el más fuerte es el que gana, etc ¡Nada bueno!. Igual solucionando esto también podríamos llegar a disminuir los casos de maltrato físico a mujeres y niños...

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    Respuestas
    1. Pues sí, muy interesante... ¿lo elaboramos?
      Un abrazo!

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    2. ¿Lo dices en serio? Que si es así a mí me cuentas hasta 3 y ya estoy lista para empezar jajaja. Besotes!

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    3. Genial! Te acabo de mandar un email :)

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  4. Vaya que me asustaste con el título en mi lista de lecturas, jajaja!! Es broma, ya me imaginaba de qué venía la cosa. Gracias por tu post, sumarle reflexión a este tema siempre ayuda! Saludos!

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  5. Genial.
    Estamos a tiempo de darnos cuenta de que esa personita merece un respeto y que el azote a tiempo no educa, sólo siembra miedo y dolor.
    Un abrazo

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